¡Me encanta esta receta!
Son unas espirales facilísimas de hacer, que quedan super bonitas y que a la gente le encanta. Cuando tengáis muchos invitados en casa, es fantástica. Yo os la presento hoy rellenas de jamón y queso, pero la podéis rellenar de lo que más o gusta, tanto dulces como saladas. Podéis hacerlas con thermomix o de manera tradicional (os pongo las dos opciones).
Esta receta la he aprendido de
Auro.
Ingredientes:
- 150 gr leche,
- 1 pellizco sal (para la versión dulce),
- 50 gr azúcar,
- 70 gr mantequilla,
- 3 yemas huevo mediano
- 1 paquete de levadura liofilizada de panadero (o 20 gramos de levadura fresca)
- 400 gr de harina (la cantidad dependerá del tamaño de las yemas con huevos, más grandes más harina)
- 2 cucharadas de azúcar vainillada (si fuera para dulce ó 1 cucharadita de sal si es para salado)
Preparación (thermomix):
Poner en el vaso la leche, la sal, el azúcar y mantequilla, programar 1 min, 37º Vel. 2. Añadir las yemas, mezclar unos seg Vel. 4
Agregar harina y la levadura 15 seg Vel. 6 Amasar 3 minutos Vel. Espiga
Preparación (tradicional):
Mezclar por un lado los ingredientes secos: sal, azúcar, levadura y harina. Formamos un volcán.
Por otro lado templamos los líquidos: la leche y la mantequilla. Es importante que estén templados, ni calientes ni fríos, porque si no, estropearíamos el levado de la masa. Batimos las yemas y se las añadimos.
Dentro del volcán añadimos los líquidos y amasamos bien hasta formar una bola homogénea.
Continuación de la preparación (ya es igual para las dos maneras):
Estirar la masa formando rectángulo, pintarlo con mantequilla fundida, añadir el relleno elegido, dulce o salado, y enrollar.
Yo estiro la masa, y le pongo encima el relleno que me guste. Luego la masa la enrollo muy bien como en el brazo gitano que quede muy bien liada y lo voy cortando con un cuchillo afilado en rodajas gruesas, es como si el rollito fuera como un chorizo que cortas en rodajas. Tienen que ser un poco gruesas. Y entonces colocas las rodajas en cápsulas de magdalena o sobre la bandeja del horno cubierta con papel de horno.
Pintar la superficie con huevo y dejarlas hasta que doblen su volumen.
Yo las meto dentro del horno pero apagado para que no tengan corriente de aire. Recordad que para que las masas con levadura de panadero crezcan bien deben tener una temperatura cercana a los 25º. Por eso yo primero pongo el horno 30 segundos a 50º y lo apago. Entonces meto la masa. Tardará en doblar el volumen como una hora más o menos. Eso lo vais viendo vosotros. Pero es importante no tener prisa.
Cuando hayan crecido, sacamos nuestras espirales del horno y lo precalentamos a 180º. Hornear de 15 a 20 minutos, sacarlas cuando estén doradas. La temperatura dependerá de vuestro horno. En la receta original ponía 200º, pero si yo las pongo así... me salen calcinaditas...
Y aquí, más de cerquita:
Espero que os guste y que la disfrutéis y la hagáis tantas veces como yo.